La comisión Europea ha propuesto la redacción de una nueva Directiva para acabar con el blanqueo ecológico o «greenwashing».
Esta Directiva va dirigida a las empresas pequeñas, medianas o grandes que consten con más de 10 trabajadores en plantilla y facturen al menos 2 millones de euros. Según la propuesta, cuando las empresas decidan formular una «declaración ecológica» sobre sus productos o servicios, tendrán que respetar unas normas mínimas sobre la manera de fundamentar y comunicar esa clase de afirmaciones.
- Principalmente, la norma obliga a las empresas a demostrar que todas sus alegaciones medioambientales estén respaldadas con pruebas científicas.
- La Directiva prohíbe las alegaciones ambientales genéricas o poco claras como las de «producto respetuoso con el medio ambiente» o «verde», etc.
- Además, esta Directiva pretende hacer frente a la proliferación de etiquetas ecológicas privadas. Actualmente hay más de 230 etiquetas ecológicas diferentes y eso genera confusión entre los consumidores.
El objetivo principal de esta nueva iniciativa legislativa es aumentar la fiabilidad y transparencia de todos aquellos productos que se declaren como ecológicos. Es decir, garantiza que si algún servicio o producto se vende como ecológico, lo sea de verdad y no sea «greenwashing».
Actualmente, esta propuesta está sujeta a la aprobación del Parlamento y el Consejo Europeos. Síguenos para estar al día de todas las novedades.